Dr. Miguel Dorta

Se trata de un grupo de adicciones comportamentales muy frecuente en nuestro entorno. En estos casos la recompensa, mediada por la dopamina, no se obtiene por efecto de una sustancia, como es el caso de las adicciones clásicas, sino a través de estímulos recibidos desde una pantalla. El refuerzo intermitente, similar al del juego, es responsable de la dependencia. En estos casos la adquisición de rutinas cotidianas incompatibles con el problema es la base del tratamiento comportamental, el uso de neuromoduladores puede llegar a ser de gran ayuda en la adquisición de las nuevas rutinas.